La Agencia de Cooperación Internacional de Corea (KOICA) para el mejoramiento de la capacidad y avance para el programa multi país del mañana, capacitó a cinco técnicos del Ministerio de Desarrollo Agropecuario (MIDA) en la comprensión e importancia a nivel mundial de los Sistemas de Patrimonio Agrícola (SIPAM).
Los técnicos del MIDA que participaron de esta capacitación laboran en la Dirección Nacional de Agricultura, en Santiago de Veraguas, la Agencia de Cacao de la Regional de Panamá Oeste y la Unidad Agroambiental y Cambio Climático.
Los Sistemas de Patrimonio Agrícola (SIPAM), es un mecanismo global establecido por la FAO en la Cumbre Mundial sobre el Desarrollo Sostenible en Johannesburgo, Sudáfrica en 2002, con el propósito de transmitir a las generaciones futuras los usos de las tierras agrícolas, conocimientos tradicionales, cultura agrícolas, paisajes agrarios y áreas importantes ricas en biodiversidad, desarrollados durante un largo periodo a medida que el ser humanos se ha ido adaptando a su entorno.
Vargas explicó que la FAO ha destinado 78 Sistemas de Patrimonio Agrícola en 24 países y en América Latina hay en siete en cinco países como Chile, Perú, México (2), Brasil y en Ecuador (2) y hay 8 en fase de identificación en siete países como Costa Rica, Argentina, Chile, Brasil, Honduras y Cuba y que este año es la primera vez que Panamá es representado en estas capacitaciones.
Agregó que al finalizar del programa Panamá presentó un plan de acción con una propuesta en un área de las riberas del Rio Chagres, con una población de indígenas donde se identificó muchas características para ser parte de un SIPAM.
Dijo que lo que se requiere para para que se formalice es que la población debe contribuir con la seguridad alimentaria y el sustento de las comunidades, conocimientos tradicionales, valores culturales, organizaciones sociales y características del paisaje, entre otros. Destacó que además hay muchas áreas que cumplen con estas características para en un futuro formalizarse como SIPAM.
La capacitación tuvo la finalidad de identificar y proteger los sistemas agrícolas, estableciendo programas a largo plazo para la conservación dinámica, gestión sostenible y la variabilidad de los sistemas tradicionales de agricultura para aumentar los beneficios regional, nacional y mundial.
Los beneficios de los sitios SIPAM son el resultado de años de evolución, de varias generaciones que han manejado los sistemas y sus componentes naturales, con prácticas y conocimientos ancestrales que han sido transmitidos de generación en generación, y que son una contribución al desarrollo de una agricultura sostenible y a la seguridad alimentaria.
El Sistema de Patrimonio Agrícola de Importancia Mundial (SIPAM) representa no solo paisajes naturales impresionantes, sino también prácticas agrícolas que generan medios de vida en áreas rurales al tiempo que combinan biodiversidad, ecosistemas resilientes y tradición e innovación de una manera única.