Panamá, jueves 27 de mayo de 2021. La producción de coco, uno de los principales rubros económicos de la provincia de Colón, está retomando fuerza, al darse la primera cosecha de la variedad de tres filos de la plantación del proyecto Mejoramiento Tecnológico del Cocotero, iniciado hace cinco años, en la Costa Abajo.
Esta primera etapa contempla la producción de las 10 primeras hectáreas de 200 sembradas en asocio con otros cultivos, entre Piñas y Belén en los distritos de Chagres y Donoso, en la vertiente del Atlántico.
Este programa, que beneficia a 173 productores de la región, fue dirigido hacia el mejoramiento de la producción e investigación de las enfermedades del coco, como la porroca del cocotero, una de las que había estado mermado la producción de esta fruta en este sector productivo del país.
Carlos Ábrego, director Regional de Colón, explicó que esta provincia ha sido históricamente uno de los máximos productores de coco, incluso en un momento determinado este producto llegó a ser considerado como una manera de pago.
Sin embargo, sus plantaciones habían venido desmejorando su calidad y cantidad de producción, por problemas fitosanitarios y por la edad de sus parcelas, algunas de 100 años, lo que originó que en 2016 se desarrollara una iniciativa para crear un proyecto de renovación de sus plantaciones con tecnología, por parte del Ministerio de Desarrollo Agropecuario y el Instituto de Innovación Agropecuaria de Panamá (Idiap).
El director regional detalló que la variedad de coco de estas nuevas plantaciones es utilizada especialmente para la producción de aceite. Además, dijo que estas 10 primeras hectáreas (156 palmeras sembradas en cada una) cultivadas en asocio, comienzan a dar fruto, en beneficio de los productores del área.
El proyecto, que estará en plenitud de producción en aproximadamente 10 años, también está dirigido hacia valores agregados, como el de exportación y comercialización, como una respuesta del MIDA, liderado por el ministro Augusto Valderrama, para contribuir a la seguridad alimentaria de las familias.
Mientras que el programa llegue a su plena capacidad productiva, se aprovechó para sembrar en las plantaciones otros productos de cosecha más rápida, como el plátano y banano, para que los productores tengan otras alternativas de subsistencia a corto plazo.